miércoles, 24 de octubre de 2007

Honrar la palabra

Guadalajara.- No hace mucho tiempo un hombre de palabra era eso: ¡Un hombre! Hoy con personajes “Light” en el gobierno, la palabra y el honor, pierden oficio. En Jalisco estamos sufriendo los embates de gobiernos frívolos y grises, donde la falta de imaginación y creatividad, son el sello que los identifica, sello que al parecer los envanece, pues no salen de una para meterse en otra peor.

Hace un par de semanas, en este mismo espacio les comentaba sobre la torpe intención de convertir lo que es una avenida en un viaducto, sin cruces para peatones ni pasos a desnivel para vehículos, aislando a quienes viven en el norte con los del sur, los de arriba y los de abajo. Bueno pues ahora con el pretexto (uno de ellos) de hacer esas obras, quieren lastimar al de por si menguado patrimonio de la población, volviendo a reemplacar todo el parque vehicular de Jalisco, cuando las placas vigentes, según el entonces gobernador de Jalisco, Francisco Ramírez Acuña, tendrían vigencia de diez años, y para reforzar lo dicho, he tomando lo escrito por el ex gobernador Guillermo Cosio en el periódico PUBLICO (20/10/07) al respecto del asunto de las placas; “Yo quiero considerar que la promesa del licenciado Ramírez Acuña fue hecha por el en su carácter de gobernador del estado. Fue una determinación de carácter oficial y no de tipo particular. En consecuencia, el actual titular del poder ejecutivo de nuestro estado debe llevar adelante ese compromiso, que es, aunque no se quiera de carácter institucional”

Y haciendo gala de su envidiable memoria, Cosio Vidaurri narra una anécdota del Presidente Lopez Mateos que a el le toco escuchar: “Lopez Mateos a su paso por Unión de Tula, Jalisco, cuando a requerimiento de de un grupo de madres de familia que lo entrevistaron en plena carretera, para demandar la construcción de un hospital, el les aseguro que luego daría ordenes para su construcción, convencido de la necesidad de atender el justo reclamo. Ante ello, alguna de las señoras peticionarias le replico: “¿Será verdad lo que nos ha dicho?” A lo cual Lopez Mateos, con el señorío que lo distinguía, le repuso: “Señora, la palabra de un presidente es para cumplirse” A los pocos días el Secretario de Salud; Jose Álvarez Amesquita, dispuso la erección del hospital, que aun esta en pie, y que es llamado Hospital de la Promesa”
Cosio nos habla de otra época y nos habla de señores. Hoy, con estos frívolos remedos de estadista, faltos de hombría de bien, que podemos esperar. Si no saben honrar su palabra, imagínense la de otros. Queda el derecho al pataleo o el intento de organizar a la población como lo esta haciendo el PRI en Tlaquepaque, porque lo que se avecina para enero del 2008 nos esta como para echar cohetes. Viene el gasolinazo, y con el, la cauda de incrementos a todo. Y así mientras en países europeos se empeñan en transportar carga y personas por ferrocarril, aquí, a llenar carreteras y a consumir gasolina, al cabo es nuestra. Cara, pero nuestra. Los vehículos, a pagar tenencia y nuevas placas a capricho.

1 comentario:

JJ Alessio dijo...

Felicidades cuñao, un abrazo